Contribuye el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública al debate sobre despenalización o legalización de la marihuana

251
  • El análisis de este órgano de la 64 Legislatura, busca contribuir a la discusión informada sobre un tema que impacta en la salud, derechos humanos, economía y seguridad, se afirma.

  • También aborda la libertad personal como un derecho humano, no únicamente para el consumo recreativo, sino en una vertiente de salud pública regulada.

Frente al debate sobre la despenalización o legalización de la marihuana (cannabis sativa), el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (Cesop), del Congreso Local presentó el análisis para contribuir al debate informado sobre este importante tema de salud pública.

En la publicación, disponible desde cualquier dispositivo con acceso a internet, se abordan y analizan datos estadísticos, opiniones de expertos y ofrece un amplio panorama sobre un asunto de salud y seguridad pública, en un entorno internacional que modifica las legislaciones respecto a la cannabis sativa.

De acuerdo a la formulación de posturas y comentarios en diferentes sectores sociales, es un tema que impacta en varias esferas de la vida pública como: salud, derechos humanos, economía, seguridad, señala el estudio del organismo de estudios perteneciente a la LXIV Legislatura del Estado.

Respecto a la prohibición de la cannabis sativa, el estudio apunta que existe un cambio de paradigma, ya que la política prohibicionista está transitando a una más permisiva, en la cual se reconocen los derechos al libre desarrollo y esparcimiento de las personas. En los Estados Unidos de América, por ejemplo, a partir del ocho de noviembre de 2016, 33 Estados de la Unión permiten el uso medicinal del cannabis, y en 11 Estados y el Distrito de Columbia, se ha legalizado el uso recreativo de esta sustancia.

En este contexto, el análisis del Cesop describe que, simultáneamente a los cambios internacionales en torno a la despenalización de la marihuana, en México, a partir de cambios en la legislación desde el año 2016, representó una diferencia insuficiente para asegurar que el Estado ha cumplido su tarea y obligaciones en el tema. En materia de derechos humanos, queda pendiente atender a las personas consumidoras y usuarias del cannabis, para otros usos diversos al medicinal.

En la publicación digital, que puede ser consultada en: https://docs64.congresooaxaca.gob.mx/centros-estudios/CESOP/investigacion/En_Contexto_Legalizacion_de_la_Marihuana.pdf, se detalla que el 21 de abril del 2016, se dictaminó la iniciativa del Ejecutivo Federal, sobre el uso médico, control sanitario y descriminalización de los consumidores de marihuana.

Respecto a usos medicinales, el análisis resalta que, gracias a la reforma al Artículo 237 de la Ley General de Salud, en México se permiten todos los actos de la cadena de producción, la prescripción médica, el transporte, posesión y uso de la cannabis, exclusivamente con fines médicos y científicos, previa autorización de la Secretaría de Salud.

Igualmente, se habilitó el uso medicinal del tetrahidrocannabinol (THC), el principal constituyente psicoactivo de la cannabis sativa, autorizando la prescripción y adquisición de medicamentos elaborados con esta planta, así como la importación médica y terapéutica de los derivados de la cannabis, sujeta a autorización de la autoridad sanitaria.

Actualmente, los dos cannabinoides principales de la planta de marihuana que presentan interés medicinal son el THC y el aceite de cannabidiol (CBD). El THC puede aumentar el apetito y reducir las náuseas; también, puede reducir el dolor, la inflamación (hinchazón y enrojecimiento) y los problemas de control muscular.

A diferencia del THC, el CBD es un cannabinoide que no altera la mente. Puede resultar útil para reducir el dolor y la inflamación, para controlar las convulsiones epilépticas, incluso es posible que sirva para tratar enfermedades mentales.

En el documento se recuerda la realización de ensayos clínicos y preclínicos con la marihuana y sus extractos, para tratar los síntomas de enfermedades y otros trastornos como la esclerosis múltiple (EM), que causa la pérdida gradual del control muscular, inflamación, dolor, convulsiones, trastornos mentales, el Parkinson y la fibromialgia.

El estudio refiere no sólo antecedentes históricos, médicos y jurídicos, sino también aborda la libertad personal como un derecho humano, no únicamente para el consumo recreativo, sino en una vertiente de salud pública debidamente regulada.